Kinsey y el sexo

El verdadero doctor Alfred Kinsey



Independientemente del gusto o no por la película (a mí me pareció bastante aceptable), quiero comentar algunos puntos finos.
El primero es que, para no variar, esos idiotas de las distribuidoras re-bautizan la cinta como "el científico del sexo", lo que para la burda audiencia consumidora de insulso cine gringo, resulta en un engaño pues la hace aparentar como si fuera una película de Adam Sandler o una asquerosa -teen movie- (a ver cuando se acaba el paternalismo aciago en este país?).
La película la ví en el cine, así que pude notar algunas reacciones en algunas escenas. Para el populacho que integraba la audiencia (cienemex santa-fé) todo iba muy bien hasta que aparecieron algunas escenas de corte... digamos gay, donde la concurrencia no pudo ocultar su asco. Irónico, pues la historia habla sobre el rompimiento de mitos y represión en materia de sexualidad humana; parece que al respetable público... o ni tan respetable, en realidad se vieron bastante nacos, le falta mucho aún en cuestión de adecuar sus valores a los nuevos tiempos, deshaciéndose de sus prejuicios e ignorancia.
Lo tercero. Creo que los productores se tomaron algunas licencias poéticas en ésta realización, tal vez demasiadas. Hasta donde yo sabía (porque yo si sabía quién era Alfred Kinsey!), no tuvo experiencias en bisexualidad, si en bigamia. Y el drama político-mediático que describen al final, creo que tampoco es una realidad biográfica, por lo menos no muy exacta. Y además, el argumento hace más énfasis en el escándalo alrededor de la vida íntima de Kinsey, que en su contribución al estudio de la sexualidad humana. A fin de cuentas es "otra tonta película americana".